- La investigación, dirigida por la Dra. Consuelo Borrás, muestra una mejora en la fragilidad, la resistencia a la fatiga o los marcadores de senescencia en el músculo y el riñón
Un equipo liderado por la Dra. Consuelo Borrás, investigadora principal del Grupo de Investigación en Envejecimiento Saludable de INCLIVA y de CIBERFES y catedrática de Fisiología de la Facultad de Medicina de la Universitat de València, ha demostrado que el uso de derivados de células madre previene la fragilidad, mejora la salud y disminuye la edad biológica en ratones viejos. La investigación, que se acaba de publicar en la revista Science Advances, propone que el tratamiento con vesículas extracelulares de jóvenes puede promover un envejecimiento saludable.
El envejecimiento se asocia con un mayor riesgo de fragilidad, discapacidad y mortalidad. Las investigaciones buscan estrategias para retrasar los cambios asociados con el envejecimiento y la fragilidad. Así, el equipo de investigación ha tratado animales viejos con pequeñas vesículas extracelulares (sEV) derivadas de células madre mesenquimales adiposas (ADSC) de animales jóvenes, y ha encontrado “una mejora en varios parámetros generalmente alterados con el envejecimiento, como la coordinación motora, la fuerza de agarre, la resistencia a la fatiga, la regeneración del pelaje y la función renal, así como una importante disminución de la fragilidad”, apunta Borrás. Según el estudio, los ADSC-sEVs promueven un efecto prorregenerativo y una disminución en el estrés oxidativo, la inflamación y los marcadores de senescencia en el músculo y el riñón. “Es más, la edad epigenética (una forma de calcular la edad biológica de alguien) es menor en tejidos de ratones viejos tratados con ADSC-sEV y su metaboloma cambia a un perfil más juvenil”, concluye.
Según los investigadores, el tratamiento con vesículas extracelulares de jóvenes puede promover un envejecimiento saludable.
Referencia del artículo: ‘Small extracellular vesicles from young adipose-derived stem cells prevent frailty, improve health span, and decrease epigenetic age in old mica’.
Jorge Sanz-Ros, Nekane Romero-García, Cristina Mas-Bargues, Daniel Monleón, Juozas Gordevicius, Robert T. Brooke, Mar Dromant, Ana Díaz, Aksinya Derevyanko, Ana Guío-Carrión, Aurora Román-Domínguez, Marta Inglés, María A. Blasco, Steve Horvath, Jose Viña, Consuelo Borrás